Revista VERDEMENTE-La Guia Alternativa de Madrid

lunes, 8 de mayo de 2017

Si sé lo que me digo internamente, lo PUEDO modificar

Si sé lo que me digo internamente, lo PUEDO modificar

En esta ocasión os comparto las experiencias de algunas personas que han participado en uno o varios talleres de Movimiento Consciente Expansivo.
Lo que se suele manifestar es la necesidad de ver, escuchar, entender e integrar lo que hace tiempo nos contamos (internamente) y no hemos sido conscientes hasta ahora. Las personas comparten “sorprendidas que, sus automatismos les habían impedido, escucharse, sentirse, pararse a mirar, etc… Ya que cuando se dan el tiempo para escucharse, sentirse y parar, aparece la verdad sobre eso que llevaba años oculto.
Normalmente, tras el primer taller de MCE comenzamos a investigar sobre: qué me digo frente al espejo, que me digo al poner límites, ante un examen, un conflicto, con respecto al dinero, las relaciones, cuándo cómo… sobre mi vida en general o ante algo específico que me esté sucediendo.
Aquí re-aprendemos a activar el “observador”. Y cuando activamos el “observador”* empezamos a darnos cuenta qué diálogos internos mantenemos en prácticamente todos los aspectos de nuestro día a día. Escucharnos y tomar conciencia nos abre el mejor camino para el cambio que queramos hacer, ya que sacamos a la luz lo que estaba operando desde la sombra.
La mayoría de los participantes se sorprenden y dicen:
“¿Como es posible que haya estado 30 años creyendo que no merecía lo mejor de la vida?”
Mi contestación es siempre igual:
Gracias por compartirlo por que hay muchas personas que se mueren sin saberlo. Ahora tienes la posibilidad de hacerte consciente de esa programación subconsciente y cambiarla pasando a la acción para que se materialice en tu vida”.
Aquí empieza realmente el proceso de cambio, desde donde estemos hacia donde queramos estar, los límites nos los ponemos solitos.
Esto significa que hemos adquirido muchos patrones de pensamiento y comportamiento de nuestros padres, educador@s, abuel@s, etc. La buena noticia es que todo es modificable, si así lo decidimos, ya que como adultos somos dueños de nuestras decisiones y responsables de nuestras vidas. Todo lo que nos hayan trasladado se puede revisar, lo que nos guste y nos haga sentir en armonía lo conservamos, lo que no… lo cambiamos.
Suele ocurrir que al revisar estos patrones, estas “buenas costumbres” adquiridas, nos damos cuenta que muchos de ellos ya no nos sirven, y simplemente los manteníamos porque lo necesitábamos para sobrevivir.
Sabéis esa sensación que tenemos a veces… “¿por qué he actuado así? o ¡madre mía parezco mi madre!” Seguro que sabéis de qué hablo.
Todo este maremágnum de sensaciones, emociones e impresiones están grabadas en nuestro cuerpo y al utilizar movimientos suaves y sencillos podemos acceder a esta información, pasar a la ACCIÓN y materializar los cambios necesarios. Esta investigación la llevo a cabo desde hace tres años, viendo como muchas personas en un corto periodo de tiempo materializan cosas que no imaginaban poder obtener en su vida.
Cuando alguien llega a un taller sin saber exactamente a qué ha venido, comienza un proceso de auto-descubrimiento, que siempre supera sus expectativas, si es que las traía.
El caso de Horacio es una de las historias de éxito de MCE. Horacio vino a su primer taller “gracias” a su pareja de entonces. En su presentación compartió que venía “a la fuerza” condicionado por ella y que no esperaba nada, que lo que tenía en su vida en ese momento era: “mucho esfuerzo y poco dinero”.
Fue muy curiosa su transformación cuando le pregunté:
¿Para que te esfuerzas tanto?
Su cara era de sorpresa, su pensamiento (compartido por él) “¿por que me pregunta esto esta tía?” y su respuesta fue: “porque si no me esfuerzo no obtengo nada ” y mi siguiente pregunta:
“¿Y ahora tienes lo que quieres con esfuerzo?”
Y su respuesta fue:
No”.
La apertura de Horacio fue maravillosa, su vida cambió por completo (sigue cambiando), desde la actitud al levantarse, saber lo que quiere en una relación de pareja, la forma de gestionar su dinero, sus dolores corporales han desaparecido (un dolor intenso en la espalda), y sobre todo el respeto, amor y comprensión que ha desarrollado hacia sí mimo.
Tenemos la posibilidad de abrirnos al cambio, perdonarnos, perdonar y satisfacer nuestras necesidades sin que nadie nos diga lo contrario.
Gracias, gracias, gracias.
Raquel Sánchez Roca

Ha sido bailarina profesional durante más de 20 años. 
Ha colaborado con Acuario, Hospital pionero en parto respetado.
Colabora en preparación al parto con Mujeres Sabias Nacimientos Acuarios.
Colabora con el espacio educativo Ojo de Agua.
Se formó como facilitadora de PSYCH-K 
Originadora del método Movimiento Consciente Expansivo (MCE) para el autoconocimiento, bienestar y expansión de la conciencia.

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